La Asociación de Vecinos Rurales de Piloña quiere hacer pública su posición ante la lamentable dejación de responsabilidades políticas del Ayuntamiento de Piloña, al abstenerse de contestar a la consulta efectuada por la Consejería de Medio Ambiente, Ordenación Territorial e Infraestructuras en relación con el proyecto de ampliación de la industria extractiva (la cantera) de La Peridiella.
Esta actitud, refleja un claro desinterés y menosprecio, por un asunto que genera un profundo malestar en los vecinos de los núcleos rurales circundantes, por los perjuicios y daños que les supone en su calidad de vida y en su entorno natural.
La empresa promotora Aridos Piloña S.L., viene incumpliendo reiteradamente las condiciones impuestas a la explotación en la declaración de impacto ambiental del 28 de julio de 2004. Algunas de las infracciones que más perturban a los habitantes de la zona son: los niveles de ruido, polvo y vibraciones que soportan; la rotura y resquebrajamiento de bienes en el interior de las viviendas; el tremendo deterioro del paisaje; los importantes desperfectos de la carretera Infiesto- Campo de Caso debido al tráfico de camiones de gran tonelaje, con el consiguiente aumento del riesgo de accidentes; la falta de seguridad para las personas de los alrededores de la explotación cuando se efectúan las voladuras, etc.
Asistimos con incredulidad, estupor e indignación ante el flagrante incumplimiento de la ley por la empresa promotora y la pasividad manifestada hasta la fecha por quienes tienen que velar por el respeto de la legalidad.
Por si esto fuera poco, hemos sabido que el Ayuntamiento de Piloña ha eludido pronunciarse como administración afectada, a la consulta formulada por la Consejería de Medio Ambiente, Ordenación Territorial e Infraestructuras. No solo no solucionan nuestros problemas sino que colaboran en su mantenimiento. ¿Sería mucho pedir que estos políticos no cobrasen cuando no trabajan? Qué tal si en lugar de fijarse a sí mismos sus sueldos, subidas anuales correspondientes, tuvieran que rendir cuentas mensualmente a un comité ciudadano y fuera este quien decidiera el montante de su nómina? ¿Quién puede sorprenderse de que la clase política esté desprestigiada?
Estar en la política supone entender los problemas, tomar decisiones y ejecutarlas. Algo tan obvio, es ignorado por el consistorio piloñés, que opta por ponerse de perfil y esquivar las cuestiones que le atañen.
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